Esta temporada navideña, Metromall Panamá se transforma en El Viaje Musical del Cascanueces, una experiencia inmersiva que envuelve cada espacio con colores vibrantes, detalles inspirados en el ballet clásico y una atmósfera de pura ilusión.

Desde el primer paso, la decoración te arrastra a la aventura: soldados de nuez guardianes de pasillos, árboles nevados que brillan al ritmo de melodías, y rincones interactivos que hacen que grandes y chicos revivan la magia de Clara, y su valiente Cascanueces. Si buscas actividades en Metromall Panamá que combinen diversión, compras y espíritu festivo, este es tu destino ideal.

Recorre el viaje: Decoraciones que cuentan la historia

El corazón de esta experiencia late en los decorados temáticos repartidos por todo el mall. Empieza por la entrada principal, donde un gigantesco Cascanueces te saluda con su espada lista para batallar al Rey Ratoncito.

Estas decoraciones no son solo visuales; invitan a qué hacer en Metromall Panamá esta Navidad con niños, convirtiendo un paseo por el centro comercial en una narrativa viva.

Villancicos y Presentaciones Navideñas

Villancicos y presentaciones que llenarán tu tarde de alegría. Sumérgete en el espíritu navideño con coros en vivo y espectáculos llenos de color y ritmo. Desde clásicos como "Noche de Paz" hasta versiones modernas que harán bailar a grandes y chicos, estas actuaciones transformarán tus tardes en un festival de sonrisas y aplausos.

Chocolate Caliente con Santa Claus

Chocolate caliente y encuentros con Santa que iluminarán el día. Nada como una taza humeante de chocolate caliente para entrar en calor mientras esperas tu turno con Papá Noel. Los niños podrán contarle sus sueños y deseos directamente, recibiendo un abrazo mágico que hará brillar sus ojos de emoción. ¡Un encuentro que quedará grabado en el corazón de toda la familia!

La Esfera de los Recuerdos Creativos

La esfera de los recuerdos donde los niños pueden dejar su creatividad y llevar un recuerdo a casa. En esta estación interactiva, los peques liberarán su imaginación decorando una gran esfera gigante con dibujos, mensajes y brillos. Al final, se llevan su propia ornamenta personalizada como souvenir, un tesoro navideño hecho por sus propias manos.